Inteligencia artificial, reputación digital y comunidad: lo que las pymes deben activar ya para no quedarse atrás

Javier Rodríguez Zapatero y Alberto Chinchilla, protagonistas del nuevo episodio del pódcast Compromiso Iberaval, ofrecen una hoja de ruta urgente para las pequeñas y medianas empresas: estrategia, formación y comunicación humana

El futuro ya está aquí. Y no espera. Las pymes españolas deben asumir de inmediato su papel en la revolución digital si no quieren perder su sitio en el mercado. Esa es la tesis compartida por dos expertos de primer nivel, Javier Rodríguez Zapatero, exdirector de Google en España, Portugal y Turquía y actual presidente de Digitalent Group, y Alberto Chinchilla, estratega digital y cofundador de la consultora Be Shared, en el nuevo episodio del pódcast Compromiso Iberaval.

Ambos coinciden en que la inteligencia artificial (IA), la estrategia digital bien definida y una comunicación basada en valores humanos ya no son opcionales para las pequeñas y medianas empresas, sino palancas imprescindibles para su supervivencia y crecimiento.

IA Y DIGITALIZACIÓN: ASIGNATURAS PENDIENTES

Rodríguez Zapatero lanza una advertencia sin matices: «La IA no es una moda, es el cambio más profundo que he visto en mis 25 años de carrera». Según sus cálculos, la adopción adecuada de herramientas de inteligencia artificial puede suponer ahorros de tiempo de hasta el 40 por ciento en múltiples tareas.

Sin embargo, identifica dos grandes barreras: el desconocimiento y la falta de voluntad.

«Cuesta convencer a directivos de pymes para que se formen, aunque sea gratis. Y si no aprendes, quedarás fuera», afirma con rotundidad.

El ex responsable de Google en España asegura que la digitalización sigue siendo la gran asignatura pendiente del tejido empresarial más pequeño, y apunta a una mentalidad conformista como freno estructural. «El gran reto de la pyme no es la tecnología, es la ambición. Hay que dejar de sobrevivir para empezar a escalar. Y eso se consigue con formación, conectividad y uso intensivo de herramientas digitales», concreta.

Frente a los temores que genera la automatización, Rodríguez Zapatero recalca que la IA es una oportunidad, pero sólo para quien la entienda y la incorpore con criterio. «Será una amenaza o una ventaja, como un coche. Depende de quién lo conduzca», dice, al tiempo que exige más compromiso público para garantizar la conectividad de alta velocidad como infraestructura crítica.

Además, advierte sobre el desfase entre el entusiasmo inicial por los fondos europeos y su ejecución real. «Hubo interés, sí, pero falta voluntad de aplicarlos con visión a largo plazo. Las pymes necesitan pasar de la intención a la acción», apunta.

El directivo explica que muchos programas de formación digital promovidos desde las instituciones no logran la participación esperada por una barrera que considera mental: «Es un error pensar que la digitalización es sólo cosa de grandes. Cada empresa, por pequeña que sea, debe encontrar su lugar en el nuevo paradigma».

Asimismo, Rodríguez Zapatero también defiende la conectividad como derecho esencial: «Del mismo modo que se garantizó la escolarización universal, deberíamos asegurar que cada persona y empresa tenga acceso pleno y de calidad a internet. Sin eso, hablar de transformación digital es una ilusión».

COMUNICACIÓN CON ALMA

Complementando ese enfoque, Alberto Chinchilla ofrece una visión más cualitativa, pero igualmente estratégica, sobre el papel de la comunicación en las pymes. Su propuesta gira en torno a un concepto propio: la «comunicación humana»: «Debemos pensar en nuestra empresa como si fuera una persona: ¿qué valores tiene?, ¿cómo se comporta?, ¿qué lenguaje utiliza?», explica.

El experto insiste en que toda estrategia debe comenzar por la comunicación interna. «Si nuestros equipos no saben hacia dónde vamos, difícilmente podrán contarlo al exterior». A partir de ahí, defiende una comunicación empática, centrada en valores, que dé protagonismo a quienes forman parte de la organización: «No se trata de tener redes sociales, sino de responder. De conversar», argumenta el cofundador de Be Shared.

Chinchilla subraya que muchas pymes siguen cometiendo el error de abrir perfiles digitales sin saber para qué. «Antes de estar, hay que planificar. Y luego, medir». Sus claves pasan por definir muy bien los públicos, seleccionar los canales en los que realmente están y mantener un ritmo coherente de publicaciones, con objetivos claros por canal. «Publicar por publicar es tirar el dinero. El objetivo es pasar del like al love, y del love a la compra».

FORMARSE PARA COMUNICAR Y USAR IA

Tanto Rodríguez Zapatero como Chinchilla coinciden en el papel fundamental de la formación como base de cualquier transformación. En el caso de la IA, advierten del riesgo de utilizar estas herramientas sin criterio, sin preparación o sin entender su funcionamiento. «No se puede copiar y pegar lo que dice la IA sin pensar. Hay que revisar, interpretar y adaptar», defiende Chinchilla, quien insiste en comenzar siempre por la formación del equipo interno antes de delegar.

En este sentido, ambos expertos reclaman que las pymes pasen de la improvisación a la estrategia, también en su comunicación. «La espontaneidad es útil, pero no sustituye a una hoja de ruta. Debe integrarse dentro de una planificación sólida», explica Chinchilla, que propone, además. prestar más atención a quienes ya son embajadores de la marca en redes sociales: «Detectarlos, cuidarlos y activar acciones específicas con ellos puede valer más que cualquier inversión en publicidad».

COMUNIDAD, REPUTACIÓN Y ATENCIÓN CONSTANTE

Uno de los aspectos en los que más insiste Chinchilla es el valor de construir comunidad: «Los seguidores que comentan, comparten o recomiendan nuestros productos deben sentirse reconocidos». Para ello, plantea desde acciones exclusivas hasta formaciones o eventos dirigidos a estos perfiles fidelizados.

En paralelo, subraya la importancia de cuidar la reputación digital en todos los canales, desde Google My Business hasta WhatsApp. «Las redes sociales son puertas abiertas 24/7. Si no respondes, pierdes oportunidades. Y si no escuchas, no mejoras».

Ambos expertos coinciden también en señalar la necesidad de profesionalizar la comunicación, ya sea con recursos internos formados o con apoyo externo bien alineado con la identidad de la empresa. «Tener redes sociales no es suficiente. Hay que gestionarlas con cabeza, con datos y con una estrategia detrás», concluye Chinchilla.

UNA URGENCIA COMPARTIDA: ACTUAR YA

El episodio de Compromiso Iberaval que reúne a estas dos voces es, más que una charla, un manifiesto de urgencia para las pymes. Urgencia para digitalizarse con criterio. Urgencia para repensar cómo comunican. Urgencia para adoptar la IA sin miedo, pero con cabeza. Y, sobre todo, urgencia para dejar de pensar que hay tiempo. Porque como dijo Rodríguez Zapatero, «esto es aquí y ahora. Y no habrá segundas oportunidades».