Productos y servicios de todo tipo pueden ser adquiridos a través de pasarelas online

Los criptoactivos proyectan un futuro lleno de transacciones en un mercado globalizado, donde los límites los marcas tú

Subirnos al tren de la digitalización ha dejado de ser una opción para ser una necesidad. Nuestro día a día se encuentra, en mayor o en menor medida, en el entorno digital y su infraestructura ha ido evolucionando de tal manera que podemos hacer cualquier gestión a través de él. Hemos pasado de tener una serie de accesorios en nuestros bolsillos que tenían unas funcionalidades únicas y concretas  (nuestra cartera con las correspondientes tarjetas de compra y afiliación, el móvil, las llaves de casa, el reloj, etc) a llevarlo todo, o prácticamente todo, en un smartphone. Las aplicaciones para móviles están a la orden del día y las grandes firmas son capaces de proporcionarte lo que necesites en tiempo real o, a más tardar, en el día. La conectividad entre oferentes y demandantes llega a tanto nivel que entendemos normal esa inmediatez.

Pero, ¿Y si vamos más allá? Hemos interiorizado esto pero la evolución no se detiene aquí. No podemos predecir el futuro, pero se atisba un rol importante de los criptoactivos en el flujo de transacciones. Todo lo que tu mente pueda imaginar se encuentra en el universo online. Es más, tenemos tantas ganas de replicar el entorno físico actual en el entorno digital, que el metaverso se está construyendo al mismo tiempo que lees este artículo.

En nuestro blog abogamos por el conocimiento, de modo que te presentamos las características que definen a los criptoactivos.

Blockchain

¿Qué son los criptoactivos?

Hablamos de un tipo de activo encriptado, de modo que se asegura la integridad de la transacción. Un criptoactivo parte de dos principios: es una divisa 100% digital e intangible, no encontrándose un respaldo físico. Su valor va a depender de la inevitable confluencia entre oferta y demanda

Su control se materializa en un registro contable inmutable que facilita el proceso, denominado blockchain. Por simplificar, hablamos de un “libro mayor” donde se incorpora el flujo de transacciones.

¿Cómo se regula?

Su regulación es compleja, y se instrumentaliza a través de la intervención de gobiernos y bancos centrales. En España se vigila por la legislación en materia de prevención de blanqueo de capitales y de lucha contra el fraude fiscal. La UE se ha convertido en el primer bloque de naciones en construir un marco normativo en este ámbito, gracias a la regulación de Mercados de Criptoactivos (MICA) que pretende preservar los intereses de los consumidores ante abusos o fraudes. Este proyecto lleva gestándose desde 2020, con distintos borradores editados.

En este tablero de juego, los proveedores de servicios de criptoactivos (CASP, por sus siglas en inglés) juegan un papel importante. Los criptoactivos tienen que ser emitidos por estos agentes, los cuales serán verificados por las respectivas instituciones de cada país, que informarán regularmente a la Autoridad Europea de Valores y Mercados (ESMA).

NFTs

¿Qué tipos de criptoactivos tenemos?

Se trata de un universo aún por explorar y definir. Aún así, podemos identificar dos grandes grupos de criptoactivos:

  • Tokens. Una representación digital creada para la comercialización de productos y servicios exclusivamente en el mundo blockchain. Hablamos de una unidad de valor que una compañía crea con sus recursos y otorga un poder especial al usuario que lo adquiera. Con un token podemos acceder a un evento, ceder unos datos o conceder privilegios extraordinarios. Aunque están en una fase de estudio algo prematura y su alcance aún se encuentra por definir, los tokens son una herramienta de inversión sugerente, dado que las empresas ponen a disposición de sus socios algo único. 
  • Criptomonedas. un criptoactivo diferente por matices. No están consideradas como medio de pago, ni cuentan con el respaldo de un banco central. Su almacenamiento se controla a través de una cartera digital y, es importante incidir, que no se puede revertir una transacción que ya se haya efectuado (salvo si acuerdas el camino inverso). Bitcoin es el nombre que obtuvo la primera criptomoneda y fue denominada así por su creador, Satoshi Nakamoto. Cada criptomoneda tiene un algoritmo propio, el cual es el encargado de controlar el número de unidades que se ofrecen cada año. En este punto, cabe destacar el concepto de “minar una operación”: se entiende como el proceso de comprobación, validación y registro de transacciones, en aras de controlar el cambio de criptomonedas.
Bitcoins

¿Qué puedo adquirir con criptoactivos?

Las pasarelas de pago se adaptan a los nuevos tiempos. A los métodos de pago convencionales (Visa o Mastercard, Paypal, Tarjeta de crédito del comercio,…) se suman los criptoactivos. Recientemente algunos comercios electrónicos han incorporado esta vía y te permiten adquirir desde entradas de conciertos, viajes o videojuegos. Una amplia amalgama de productos por los que canjear tus criptoactivos.

 

criptoactivos en vigor

Un mercado atractivo aún por explorar. Expertos equiparan la volatilidad de los valores con la de los mercados bursátiles que conocemos, pero no se atisban a colocar un dique a este océano de oportunidades.